
La habitación tenía espejos
y había siete veces una mujer como tú
Decidimos una tormenta y vimos
en la televisión un documental
sobre un hombre que había muerto a los 27
porque de niño no pudo aprender la risa
Las paredes traían jadeos
que se mezclaban con los motores de la calle,
con la voz de un radio,
con el ojo de dios tras los espejos
que nos miraba verdes
fumando en la oscuridad
Esta es un poco surrealista, no?
ResponderBorrarel ojo de dios!!!!
ResponderBorrarFoucacutl dice: cuando dios bajo a la tierra... esta frase es magistral
huyo de foucault pero en esta parte tiene razón, la imagen terrorífica por excelencia es el ojo, y más aún el ojo de dios.
Paranóica sadomasoca.
Gracias por visitarme, y mirarme...
Seguramente los espejos de Dios multipliquen ese, su ojo, siete veces siete, pero aún asi nunca llegará a ver a ese hombre que muere por ausencia de risa en su vida.( esta estrofa me parecio grandiosa)
ResponderBorrarHay sin duda un Dios meope que ve solo lo que quiere ver...mientras fuma en la oscuridad!
abrazo Maestro
Horacio
La pusiste difícil, cabrón. Pero, éste, al ser de una pieza, lo dejaste como mi favorito de las últimas entradas que he leido.
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